El Tour de France ha llegado a nuestra ciudad y estamos todos muy contentos.

La promoción, organización, logística e infraestructura de la carrera se han financiado con dinero público, en concreto, un gasto de más de 14 millones de euros. A este gasto público, hay que añadir el impacto que ha tenido en la vida cotidiana de la ciudadanía: calles y carreteras cortadas, incidencias en los servicios, reducción del transporte y la movilidad, etc. Por si fuera poco, mientras la inversión pública y los daños recaen en la ciudadanía, el beneficio económico del evento lo recibirá mayormente la industria turística. Una gran manipulación mediática, aprovechando la gran vinculación de los vascos con el ciclismo (un deporte que se vive con mucha pasión y que cuenta con una numerosa afición) para promocionar el negocio turístico del Grand Depart del Tour y el trasvase del dinero público al privado.